El lunes 25 de mayo de 2020 George Floyd fue asesinado por funcionarios de la policía de Minneapolis, tal crimen quedó registrado gracias a transeúntes que grabaron videos con sus teléfonos celulares que mostraban a uno de los agentes arrodillado encima de su víctima presionándole el cuello hasta darle muerte.
La principal consecuencia que generó este asesinato a sangre fría fue la de multitudinarias protestas a nivel mundial, y tanto Seattle como el Condado King no se iban a quedar atrás; esto se debe principalmente a que la ciudad es de izquierda, tanto así que antiguamente se referían a ella como la "República Socialista Soviética de Seattle." Por esa razón, las manifestaciones fueron particularmente duras aquí y se extendieron por varias semanas, incluyendo una "zona liberada" en el sector de Capitol Hill, que viene siendo algo así como el "23 de enero" de esta ciudad, pero claro, al estilo de los EEUU.
La "zona liberada" llamada "CHOP" o "Capitol Hill Organized Protest" por sus siglas en inglés, al final tuvo la misma suerte de todos los lugares que se anarquizan y se disolvió luego de que ocurriesen varios crímenes en el lugar. Sin embargo, esto no fue lo único malo que pasó; durante los primeros días de las manifestaciones, factores anarquistas y delincuentes comunes que se infiltraron en ellas propiciaron desórdenes que devinieron en saqueos, los cuales se extendieron por varios días en muchos lugares del condado.
Fue algo bastante similar a lo que pasó cuando "El Caracazo," aunque en menor escala y sin pérdidas humanas que lamentar; aunque como consecuencia de los desórdenes se impuso el toque de queda y aquí en Tukwila, que es una población principalmente comercial, unos cuantos negocios se vieron afectados y sufrieron pérdidas considerables. Toda esa zona fue cerrada al tránsito para evitar saqueos durante tres días y solamente se podía circular de noche con salvoconductos; por suerte el trabajo me dio uno, porque salía de allí después de las nueve de la noche, hora en que se iniciaba el toque de queda.
Gitty, de hecho, una tarde se quedó varada en el centro de Seattle en medio de una manifestación, aunque por suerte esta era pacífica y no había infiltrados buscando desorden; pero sin importar esas circunstancias ella se estresó bastante, porque recuerdo que me llamó al trabajo mientras esperaba que pasaran los manifestantes para que la policía restableciera el tránsito en la avenida y pudiera circular el autobús que la iba a regresar a casa.
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